El chollo inmobiliario en Mecklemburgo-Antepomerania – una inversión estable
Mecklemburgo-Antepomerania (MA) es uno de los “Länder” de Alemania más codiciado para pasar las vacaciones. Pues, no hace falta irse lejos para disfrutar del sol, del mar y de la playa. Muchos Alemanes quieren disfrutar del aire mediterráneo durante todo el año y por eso eligen cambiar su domicilio a MA. Después de 20 años de la caída del muro los precios de los inmuebles siguen estables y razonables.
Inmuebles abandonados en MA buscan a nuevos propietarios urgentemente
Sobre todo en el interior, barrios enteros están vacíos.
Durante la RDA muchos propietarios fueron expropiados y los inmuebles cayeron en las manos del estado. Así que muchos propietarios se convirtieron en inquilinos o incluso se veían obligados de abandonar su propiedad.
Especialmente grave fue la situación para los propietarios de las fincas. Al cabo de la segunda guerra mundial la ex Unión Soviética se ha hecho con el mando en MA y desalojó a los terratenientes. Durante la RDA muchas fincas y castillos se utilizaban como orfanatos, escuelas o supermercados.
Pero la constante escasez de viviendas en los 40 años de la división de Alemania obligaba a la RDA de construir nuevos edificios con la finalidad privada y comercial.
Sin embargo después de la caída del muro los inmuebles construidos ya no se necesitaban y se quedaron vacíos. A más mucha gente se fue al oeste de Alemania, así que aún más viviendas quedaron desocupadas.
Ahora, después de 20 años, la situación en MA ha mejorado, también gracias al boom turístico, pero todavía numerosas viviendas buscan a propietarios. Se trata de verdaderos chollos, que atraen siempre más gente a MA.
Pero, no es oro todo lo que brilla.
Chollos tienen sus perfidias
Después de 20 años de estar desocupados, los inmuebles no se encuentran en mejores condiciones. Los estragos del tiempo y el vandalismo han dejado sus huellas, así que muchos supuestos chollos se convierten en un asunto costoso. Porque sobre todo las instalaciones sanitarias, los tendidos eléctricos y las tuberías de agua están bien en pésimas condiciones o no son existentes. También hay que saber, que en muchas casas no había calefacción eléctrica, pero se calentaba con madera.
Por tanto hay que incluir en los cálculos los costes de saneamiento, los cuales pueden ser bastante altos. Para tener los costes bajos, hay que tener aguante y ser manitas. Pero puede valer la pena, ya que la recompensa son sol, mar y playa delante de casa.